
Dos conceptos me han estado rondando la cabeza: el amor y la libertad. Se me ocurren frases de esas que en inglés llaman “catchy”, un adverbio parte de la feria anglosajona de nombrar toda percepción y sensación, que significa algo como “que atrapa”. Entre estas frases que atrapan, me vino a la mente “¿Qué es el amor sin libertad?” y, claro, su correspondiente “¿Qué es la libertad sin amor?”. La primera, para mí, implica que el apego crece como la hierba (si la hierba fuera instantánea) y nos apresa en el juego del cálculo, del plan, del no me imagino qué sería sin ti, sin esto, si no fuera como ahora. Implica que el amor es una experiencia y no un estado, un ser en un momento sin fronteras y no un deber ser con duración ya programada. Como si fuera extraño o prohíbido preguntar —ok, ayer me amabas pero ¿hoy me amas?—. Soy, como casi cualquiera que lea esto, un naúfrago, un explorador de aguas profundas o un surfista de oleaje alto. Y sé, porque el corazón tiene memoria descortés y a raja tabla, que el amor es casi siempre el recuerdo de un álgido momento que permea los momentos más comunes y los bajos. Como una reunión en la cantina con amigos es la negociación que compartimos alrededor de revivir esa explosión de risa loca que sucedió por un instante. Todo es un querer volver y la meta perseguida casi no tiene dimensiones. Es un punto en una escala atemporal.
No obstante, la otra frase no tiene esa retórica del pez que salta de una pecera a otra y, en su atrevimiento, llega a una meta idéntica al origen. La libertad sin amor es una trampa simple, como el sol sin calor o como el mar sin agua. No existen. Así para ser libre hay que amar, primero todo que lo soy, sin condiciones y después todo lo que somos, sin separaciones. La libertad no implica ignorar el agua si nado, o la tierra si camino. Me sumerjo y tomo aire, empujo mi pie contra el suelo para avanzar mi cuerpo. Lo hago todo sin preguntas, sin razones y sin metas, como cuando digo quisiera estar así contigo para siempre, nada más así, mirándonos.
¿Con qué elementos, guiños, datos, numerología fantasma, calendáricas fórmulas de aves de paso podría haber calculado que ese día, conocería a un hombre que transformó un esqueje de piedra basáltica en una figura de tan voraz significado? Cómo saberlo, cómo anticipar que te conoceré. A ti, la que tal vez al llegar con tus pies talles el suelo frío y con tus manos hagas guirnaldas amarillas en donde en apariencia solo hay aire. Cómo saber que sabré reconocerte y entre tus dedos caiga la arena de un momento despertar y ver tus ojos, cuando ya se está fundiendo mi razón con la cera caliente de tu aliento.
Espero ser libre para verte y para estar completamente. Tener la libertad de ya no verte y seguir completamente. Y todo yo moverme si te sigo. En fin, las cosas que provoca un corazón tallado en piedra.
No obstante, la otra frase no tiene esa retórica del pez que salta de una pecera a otra y, en su atrevimiento, llega a una meta idéntica al origen. La libertad sin amor es una trampa simple, como el sol sin calor o como el mar sin agua. No existen. Así para ser libre hay que amar, primero todo que lo soy, sin condiciones y después todo lo que somos, sin separaciones. La libertad no implica ignorar el agua si nado, o la tierra si camino. Me sumerjo y tomo aire, empujo mi pie contra el suelo para avanzar mi cuerpo. Lo hago todo sin preguntas, sin razones y sin metas, como cuando digo quisiera estar así contigo para siempre, nada más así, mirándonos.
¿Con qué elementos, guiños, datos, numerología fantasma, calendáricas fórmulas de aves de paso podría haber calculado que ese día, conocería a un hombre que transformó un esqueje de piedra basáltica en una figura de tan voraz significado? Cómo saberlo, cómo anticipar que te conoceré. A ti, la que tal vez al llegar con tus pies talles el suelo frío y con tus manos hagas guirnaldas amarillas en donde en apariencia solo hay aire. Cómo saber que sabré reconocerte y entre tus dedos caiga la arena de un momento despertar y ver tus ojos, cuando ya se está fundiendo mi razón con la cera caliente de tu aliento.
Espero ser libre para verte y para estar completamente. Tener la libertad de ya no verte y seguir completamente. Y todo yo moverme si te sigo. En fin, las cosas que provoca un corazón tallado en piedra.